Fahrenheit 451, de Ray Bradbury

Título y autor:
Fahrenheit 451, Ray Bradbury. Biblioteca El Mundo, Nº 54. 192 págs.

Sinopsis:
Guy Montag es un bombero y el trabajo de un bombero es quemar libros, que están prohibidos porque son causa de discordia y sufrimiento.
El Sabueso Mecánico del Departamento de Incendios, armado con una letal inyección hipodérmica, escoltado por helicópteros, está preparado para rastrear a los disidentes que aún conservan y leen libros.

Valoración:
El problema de leer a los grandes clásicos, en este caso de la CF, es que siempre esperas más de lo que después encuentras.

Llevaba tiempo queriendo leer el tercer volumen de esa trilogía facticia que junto a “1984” de Orwell y “Un mundo feliz” de Huxley forman la visión distópica o ucrónica de un mundo futuro para ellos que, para nosotros, es el presente.

Como ya he dicho, cuando encaras un libro de esta enjundia siempre vas con unos prejuicios o unas expectativas que rara vez se cumplen. Ya me pasó con el libro de Huxley y me ha vuelto a pasar con Bradbury. Cuando empiezas a leer te da la impresión de que has llegado a una película que está empezada. No sabes por qué el protagonista está en esa encrucijada moral ni qué pinta la chica con la que se encuentra. La sociedad apenas está esbozada y el cambio de actitud del personaje no está justificado.

Es verdad que tiene buenos pasajes y que la lectura se hace interesante si obvias la poca profundidad en el desarrollo de los personajes o de la sociedad que los rodea. La trama nos va llevando poco a poco hacia un final que aunque, en cierto modo, esperas, puede hacerte reflexionar sobre lo que has leído.

En fin, que es una novela que todo el mundo debería leer pero que bajo mi punto de vista no supera la comparación con las otras dos (ni falta que hace), especialmente con la genial obra de Orwell.

Puntuación: 3/5